Con un motor de más de 14.000 cv, el constructor de yates sueco pretende romper esquemas con la definición de yate. Y es que Strand Craft no planea solamente un yate, sino un espacio en el que al entrar respires otro tipo de oxigeno, pises sobre lujo y veas la máxima expresión del lujo. Del precio no es necesario hablar porque este tipo de productos solo esta al alcance de unos pocos y nunca mejor dicho, pero podréis imaginar que el descuento serán millones de euros.

La compañía Strand Craft, ha incorporado en el extremo proyecto de su yate, un espacio novedoso e interesante. Se trata de un garaje donde se ospeda un espectacular viajero, un supercar que la propia firma elaborará, claro está que a partir de las colaboraciones de otras casas. Sin duda el proyecto es precioso y con mucho futuro. Y si ya es difícil cruzarse con un Veyron o un Rapide, imaginaros un modelo tan exclusivo como este.

Lo que me confunde es que monta dos motores MTU 16V4000 de origen Rolls&Royce de más de 4.600 cv cada uno. Supongo que hasta llegar a la cifra antes citada de 14.000 cv habrá algun tipo de modificación mecánica o algún incentivo secreto más que no sabemos todavía. La velocidad máxima del yate se sitúa en 50 nudos, unos 100 Km/h, más o menos. Teniendo en cuenta las dimensiones del barquito, es más que suficiente. Mide 38 metros y en el interior albergan 4 camarotes dobles con TV incorporado de 52″ con tecnología LED, sistema de audio a cargo de Bang&Olufsen y más de un salón.

La estrella del yate es un supercar de origen desconocido hasta la fecha con un motor V12 bi-turbo de 880 cv con una velocidad punta de más de 370 Km/h y una aceleración digna de un deportivo de altas prestaciones. No se especifíca nada más acerca del deportivo, pero supongo que a medida que vaya cobrando vida el proyecto, aparecerán más datos al respecto.

Vía: GTSpirit